Fin de la restauración en la iglesia de Villalmanzo
FUENTE Diario de Burgos
El arreglo de la sacristía culmina las obras de restauración de la iglesia.
Los trabajos ejecutados durante 2006 también han incluido la apertura de ventanales en la nave norte, la recuperación del retablo principal y la colocación de una nueva campana. La intervención se remonta al año 2004.
B.G.R. / VILLALMANZO
La restauración de la iglesia de Villalmanzo comenzó en el año 2004, pero no ha sido hasta finales de 2006 cuando han finalizado los principales trabajos de recuperación de este templo dedicado a la Asunción de Nuestra Señora. El arreglo integral de la sacristía, la apertura de ventanales y colocación de vidrieras en la nave norte, la limpieza del retablo principal y el estreno de una nueva campana y del sistema eléctrico de volteo han culminado una intervención que se inició con la sustitución completa de la cubierta y un pintado general.
Más de 60.000 euros ha invertido la parroquia de Villalmanzo en los trabajos del último año. La financiación de los mismos ha sido posible gracias a las aportaciones de los fieles y a una importante subvención (el 45% del coste global) del grupo de acción local Adecoar. A pesar de todo, y con la satisfacción que supone devolver al templo su belleza original, el párroco, Fernando García Cadiñanos, ya piensa en nuevos trabajos. «Nos quedaría el arreglo del campanario, la sustitución del suelo de la iglesia y la restauración de los otros seis retablos que alberga. Lo iremos haciendo poco a poco», explica el sacerdote.
Los últimos trabajos de restauración de este templo gótico comenzaron el pasado mes de mayo y se prolongaron hasta primeros de diciembre. Su finalización fue festejada con una serie de actividades que incluyeron conferencias y visionado de películas. La intención de la parroquia es que la sacristía de la iglesia, «casi catedralicia», se abra a usos culturales aprovechando el amplio espacio que ocupa dentro del templo.
La restauración integral de esta dependencia, con un coste de 36.000 euros, ha consistido en la sustitución del suelo empleando el mismo material y siguiendo idéntico dibujo al antiguo. «La recuperación del original resultaba imposible», precisa García Cadiñanos. También se ha intervenido en la bóveda, una actuación que ha sacado a la luz el año de construcción de la sacristía: 1758. La colocación de calefacción ha completado los trabajos en este espacio del templo, que han afectado a una cajonera de madera de nogal de tres cuerpos datada en el siglo XVIII. Solo esta última actuación ha costado 12.000 euros.
El retablo mayor está dedicado a la Asunción de Nuestra Señora, es de estilo barroco y su autoría se atribuye a Diego Alonso Sohano. De los trabajos de restauración de este conjunto artístico se ha encargado la empresa burgalesa Cerdá e Hijos. Debido a que la estructura se encontraba en buen estado, la intervención se ha centrado en la limpieza completa de la obra y en la sustitución del sagrario por uno nuevo cuyo estilo se adecuara al del resto de la obra. La cuantía ha sido de 8.000 euros.
DESCUBRIMIENTO. La nave norte de la iglesia se encontraba cegada con adobe para evitar el frío. La apertura de los dos ventanales que había inicialmente ha descubierto una tracería del siglo XIV. En los mismos se han colocado sendas vidrieras, una dedicada a los Mártires de Cardeña, patronos del pueblo, y otra a un motivo eucarístico. Las dos son obra de Adriana Franco. La actuación ha superado los 5.000 euros.
Por último, se ha colocado una nueva campana elaborada a partir de otra antigua y se ha instalado el volteo eléctrico, lo que ha supuesto una inversión de 9.800 euros. La iglesia brilla en su interior, pero también ha visto cómo, a iniciativa del Ayuntamiento de la localidad, se ha adecuado todo el atrio revistiéndolo con asfalto y añadiendo una zona con jardines.
Las obras realizadas en el templo en el último año han completado las iniciadas en el año 2004 por el anterior párroco, Julio González. El actual explica que la primera intervención consistió en la sustitución y arreglo del tejado y el pintado general de la iglesia, actuación que fue posible en virtud del convenio que existe entre el Arzobispado, la Junta de Castilla y León y la Diputación de Burgos. En 2005 se procedió a la renovación de todo el sistema eléctrico e iluminación, así como a la restauración del coro. Dos trabajos que se realizaron gracias al esfuerzo altruista de algunos vecinos.
Categorías: Villalmanzo
El arreglo de la sacristía culmina las obras de restauración de la iglesia.
Los trabajos ejecutados durante 2006 también han incluido la apertura de ventanales en la nave norte, la recuperación del retablo principal y la colocación de una nueva campana. La intervención se remonta al año 2004.
B.G.R. / VILLALMANZO
La restauración de la iglesia de Villalmanzo comenzó en el año 2004, pero no ha sido hasta finales de 2006 cuando han finalizado los principales trabajos de recuperación de este templo dedicado a la Asunción de Nuestra Señora. El arreglo integral de la sacristía, la apertura de ventanales y colocación de vidrieras en la nave norte, la limpieza del retablo principal y el estreno de una nueva campana y del sistema eléctrico de volteo han culminado una intervención que se inició con la sustitución completa de la cubierta y un pintado general.
Más de 60.000 euros ha invertido la parroquia de Villalmanzo en los trabajos del último año. La financiación de los mismos ha sido posible gracias a las aportaciones de los fieles y a una importante subvención (el 45% del coste global) del grupo de acción local Adecoar. A pesar de todo, y con la satisfacción que supone devolver al templo su belleza original, el párroco, Fernando García Cadiñanos, ya piensa en nuevos trabajos. «Nos quedaría el arreglo del campanario, la sustitución del suelo de la iglesia y la restauración de los otros seis retablos que alberga. Lo iremos haciendo poco a poco», explica el sacerdote.
Los últimos trabajos de restauración de este templo gótico comenzaron el pasado mes de mayo y se prolongaron hasta primeros de diciembre. Su finalización fue festejada con una serie de actividades que incluyeron conferencias y visionado de películas. La intención de la parroquia es que la sacristía de la iglesia, «casi catedralicia», se abra a usos culturales aprovechando el amplio espacio que ocupa dentro del templo.
La restauración integral de esta dependencia, con un coste de 36.000 euros, ha consistido en la sustitución del suelo empleando el mismo material y siguiendo idéntico dibujo al antiguo. «La recuperación del original resultaba imposible», precisa García Cadiñanos. También se ha intervenido en la bóveda, una actuación que ha sacado a la luz el año de construcción de la sacristía: 1758. La colocación de calefacción ha completado los trabajos en este espacio del templo, que han afectado a una cajonera de madera de nogal de tres cuerpos datada en el siglo XVIII. Solo esta última actuación ha costado 12.000 euros.
El retablo mayor está dedicado a la Asunción de Nuestra Señora, es de estilo barroco y su autoría se atribuye a Diego Alonso Sohano. De los trabajos de restauración de este conjunto artístico se ha encargado la empresa burgalesa Cerdá e Hijos. Debido a que la estructura se encontraba en buen estado, la intervención se ha centrado en la limpieza completa de la obra y en la sustitución del sagrario por uno nuevo cuyo estilo se adecuara al del resto de la obra. La cuantía ha sido de 8.000 euros.
DESCUBRIMIENTO. La nave norte de la iglesia se encontraba cegada con adobe para evitar el frío. La apertura de los dos ventanales que había inicialmente ha descubierto una tracería del siglo XIV. En los mismos se han colocado sendas vidrieras, una dedicada a los Mártires de Cardeña, patronos del pueblo, y otra a un motivo eucarístico. Las dos son obra de Adriana Franco. La actuación ha superado los 5.000 euros.
Por último, se ha colocado una nueva campana elaborada a partir de otra antigua y se ha instalado el volteo eléctrico, lo que ha supuesto una inversión de 9.800 euros. La iglesia brilla en su interior, pero también ha visto cómo, a iniciativa del Ayuntamiento de la localidad, se ha adecuado todo el atrio revistiéndolo con asfalto y añadiendo una zona con jardines.
Las obras realizadas en el templo en el último año han completado las iniciadas en el año 2004 por el anterior párroco, Julio González. El actual explica que la primera intervención consistió en la sustitución y arreglo del tejado y el pintado general de la iglesia, actuación que fue posible en virtud del convenio que existe entre el Arzobispado, la Junta de Castilla y León y la Diputación de Burgos. En 2005 se procedió a la renovación de todo el sistema eléctrico e iluminación, así como a la restauración del coro. Dos trabajos que se realizaron gracias al esfuerzo altruista de algunos vecinos.
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Etiquetas: Villalmanzo
Muchas Felicidades a todos aquellos que han conseguido que la iglesia de nuestro pueblo vuelva a brillar como realmente se merece, se han arreglado muchas cosas y esperemos que en un futuro no muy lejano y con la ayuda de nuestro parroco(al cual agradecerle todo lo que hace) continuemos con la restauracion y consigamos ser la envidia de otros lugares.
Madriles
PD: y que hay que decir de la pedazo de estrella que alumbraba la iglesia este año "impresionante", esperemos que el año que viene venga a compañada de.......
jeje no conocia tantas cosas de la iglesia graciax x la info
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